La directora del Sincrotrón Alba de Cerdanyola, Caterina Biscari, pide un "presupuesto mayor" para 2018 para los nuevos proyectos de la infraestructura cientítica, que contempla la construcción de nuevas Líneas de Luz, y ha animado a empresas a que la utilicen para desarrollar capacidades innovadoras.
"Esto se está empezando a mover, pero necesitamos mucho más -ha exigido la directora del complejo científico-. Si es verdad que la economía está mejorando, a la ciencia no ha llegado".
Biscari ha indicado que, de cara al futuro, el Sincrotrón utilizará los fondos europeos Feder, que cubren el 50% del presupuesto, y que el complejo pretende atraer fondos del programa Horizonte 2020. "Necesitamos cubrir la cofinanciación del otro 50%", ha reclamado Biscari este lunes 26 de junio durante un encuentro informativo de Foro España Innova, organizado por Nueva Economía Fórum.
No obstante, Biscari ha reconocido que la financiación para operaciones ha estado "siempre asegurada" por el Estado y por la Generalitat (que financian a partes iguales el Sincrotrón). De hecho, el presupuesto para operaciones ha ido creciendo desde 2012 (de 20 millones de euros a unos 24 millones anuales), según ha comentado Biscari, que recuerda que el Sincrotrón es un proyecto nacional pero con "espíritu internacional".
En este sentido, ha defendido que el Sincrotrón Alba es "la única infraestructura de este tipo" que se construyó dentro del presupuesto inicial previsto (200 millones de euros de los 201 millones) y a tiempo (en 2010, fecha prevista para su finalización), cuando, para Biscari, España era un país "que no sabía qué era un acelerador", lo cual tiene "mérito".
La directora del Sincrotrón también ha hablado de las dificultades administrativas por las que atraviesa el proyecto desde que comenzó la crisis en España. "No podemos ofrecer desde 2012 contratos fijos a las personas que vienen a trabajar con nosotros", se ha quejado Biscari, que considera que esto supone una "complicación" a la hora de atraer y generar talento en "un mundo tan competitivo como es el de la ciencia".
Además de la apertura de nuevas Líneas de Luz -actualmente Alba cuenta con ocho en activo para poder realizar experimentos-, el Sincrotrón contempla la creación de un centro de microscopia avanzada, otro dedicado a la biología estructural y la creación de un láser de electrones libres.
Estas líneas de luz permiten realizar experimentos en diversos ámbitos científicos: química, ciencias de la vida, física, ciencia de materiales, biología, nanotecnología, patrimonio histórico y artístico, etc.
OBJETIVO: ANIMAR A EMPRESAS A QUE UTILICEN ALBA
A diferencia de otros sincrotrones, tal y como ha señalado Biscari, el de Alba tiene un carácter más "práctico", pues tanto la comunidad educativa como la empresarial utilizan sus instalaciones para experimentar.
Actualmente, unos 30.000 usuarios utilizan las Líneas de Luz de los sincrotrones de todo el mundo, mientras que Alba cuenta con unos 3.000 usuarios (2.000 procedentes de España y unos 1.000 del extranjero).
Sin embargo, la directora del proyecto ha lamentado que desde 2012 a lo que se dedica el Sincrotrón es a la divulgación científica hacia las empresas para animar a estas a que utilicen sus servicios. "Somos un instrumento para la innovación para que empresas vengan a utilizar nuestros instrumentos y se desarrollen", ha manifestado Biscari, que incide en que el desarrollo industrial es uno de los retornos que tienen este tipo de infraestructuras científicas hacia la sociedad, al retorno económico y el educativo.
INCIDIR EN LA EDUCACIÓN PRIMARIA
Biscari comenta que el retorno educativo se desarrolla en dos niveles. Por un lado, es una inversión educativa tanto para las personas que interactúan de manera directa con el Sincrotrón (estudiantes de desde FP hasta de Doctorado) como para la sociedad en su conjunto. "Lo que queremos transmitir es que la ciencia es un bien común que pertenece a todos", ha declarado.
Según ha expresado la directora, en Alba hay alrededor de un 35% y 40% de investigadoras, pero asegura que este porcentaje varía dependiendo del grupo de trabajo. Por ejemplo, en Controles hay dos mujeres por 40 hombres.
Como solución para promover que las niñas tengan interés por la ciencia, Biscari propone cambiar los modelos de educación en la etapa de Primaria, porque a su juicio, cuando las chicas llegan a la Universidad, ya se han "perdido por el camino".
Para Biscari, el hecho de que sea una mujer la directora de una infraestructura científica como es el Sincrotrón Alba -o el CERN, también dirigido por una mujer-, es una forma de "abrir caminos" para las chicas, ya que estas pueden verla como "ejemplo". "Se puede ser madre, mujer y científica", ha concluido.