El PSC gobernará en solitario en Cerdanyola, al menos de momento. Pese al acuerdo alcanzado hace unas semanas para repetir coalición con CiU, el 'bloqueo' del resto de partidos en el Ayuntamiento al cartapacio que pretendían aprobar ambas formaciones ha hecho dar un paso atrás a la federación nacionalista, dejando el gobierno en manos de los 7 regidores socialistas.La alcaldesa de Cerdanyola, Carme Carmona, ha recordado que el acuerdo con CiU no otorgaba mayoría al ejecutivo local y que la voluntad de ambos grupos era buscar acuerdos para lograr "un gobierno fuerte y estable, basado en programas y acuerdos de ciudad". Carmona explica que han intentado seguir esa línea desde el primer día, "pero algunas de las fuerzas políticas del consistorio no han visto claro su participación en el gobierno".
Ante la dificultad para alcanzar consensos, Carmona explica que "hemos reconsiderado la situación en el sentido que creemos que se debía volver a empezar de nuevo, abrir todas las puertas y hacer un acto de responsabilidad nuevamente hacia la ciudad". En este sentido, la alcaldesa de Cerdanyola remarca que CiU "ha preferido dar un paso atrás y dejar el gobierno en un solo grupo para que comencemos a buscar de nuevo las mayorías necesarias para salir adelante". Carmona ha agradecido este "acto de responsabilidad" de CiU, al tiempo que ha negado cualquier pacto o preacuerdo con algún grupo municipal y ha insistido en que todas las fuerzas con representación en el plenario tienen opciones de incorporarse al gobierno, también la federación nacionalista.
De momento, el Pleno del Ayuntamiento dio luz verde ayer a la configuración del nuevo gobierno, que mantiene la estructura organizativa del cartapacio formado por PSC y CiU, aunque sólo con los 7 regidores socialistas. Así, Carmona ha explicado que se mantendrán "tres grandes áreas básicas" -Organización y Desarrollo Económico; Urbanismo y Territorio; y Atención a las Personas, Cohesión Social y Bienestar Social- y una área destacada de apoyo a la alcaldía como es la área de Presidencia. La dirigente socialista destaca que esta estructura supone una simplificación de la administración y que, por tanto, se aligerará el gasto público porque sólo se realizarán tres comisiones informativas.
En cuanto al régimen de dedicaciones y retribuciones aprobadas, Carmona señala que se contemplan cinco dedicaciones exclusivas en el gobierno: la alcaldesa, los regidores responsables de las tres áreas básicas -Montserrat Montiel en Atención a las Personas, Cohesión y Bienestar Social; Francisco Ortiz, en Organización y Desarrollo Económico; y Eulalia Mimó, en Urbanismo y Territorio- y el regidor responsable de Seguridad Ciudadana y mantenimiento del Espacio Público y Dependencias Municipales, Félix Sánchez. Tras el paso atrás de CiU, Sánchez incorpora también la delegación de Deportes. El resto de regidores del gobierno municipal estarán en régimen de dietas.
Por lo que hace referencia a los cargos eventuales o de confianza, la propuesta del gobierno aprobada el pasado jueves es la de tres directores de área y un coordinador del gabinete de alcaldía. En cuanto a la representación en órganos supramunicipales, Carmona ha explicado que se ha aprobado el mínimo necesario y que el resto quedará pendiente de las conversaciones con el resto de grupos para valorar su posible participación.
"No sé si fue un error"
Carmona no ha querido valorar si alcanzar un acuerdo con CiU, con un gobierno aún en minoria, fue un error y ha preferido centrarse en el futuro: "Yo ahora lo que me planteo es cómo buscar mayorías y no qué es lo que hemos hecho mal".
