Una pareja formada por un hombre valenciano y otro chino, residentes en China, viajarán hasta Ripollet para poderse casar este próximo sábado, ya que la legislación china no permite el matrimonio homosexual ni en el consulado español.
Según ha informado el consistorio ripolletense, en este caso ha hecho público un acto privado para destacar su "carácter reivindicativo" con el fin de normalizar el matrimonio de LGTBI, después de que España fuera el segundo estado del mundo en reconocer estos enlaces.
"El colectivo LGTBI debe tener los mismos derechos en todos los países del mundo, debe poder casarse, tener hijos y tener una ley que los ampare y defienda, como es el caso de Cataluña con la ley contra la LGTBIfobia", explica el consistorio en el comunicado.
El ayuntamiento considera la celebración de esta boda civil como una oportunidad para "recordar las injusticias" que, dice, aún existen hoy en día en China para el colectivo LGTBI, y apela a normalizar su situación "en el resto de países".
"Una historia de amor que llega a su punto álgido a 9.000 kilómetros de casa de los chicos, en Ripollet", concluye el ayuntamiento, que ha gestionado la celebración de la boda a partir del momento en que la pareja se puso en contacto con el concejal de políticas LGTBI, Fran Sánchez.
Foto: Ripollet.cat
