Los impulsores de la manifestación han confeccionado un manifesto en el que se apunta que "el proceso privatizador que desde hace años sufre la sanidad pública se ha visto acelerado desde las últimas elecciones autonómicas, a causa del recorte presupuestario recetado por el nuevo conseller de Salut, Boi Ruiz". En este sentido, apuntan que la "progresiva pérdida del papel de la atención primaria" como pilar fundamental de la sanidad pública da como resultado "un deterioro de la calidad asistencial". En el caso del Vallès Occidental, "hace tiempo que existe una situación de colapso, en camas hospitalarias, en derivaciones a los especialistas, y unas listas de espera para intervenciones quirúrgicas y para la mayoría de pruebas diagnósticas que son tres veces superiores a la media catalana", apuntan.
En el manifiesto se recuerda que la Conselleria de Salut presentó en julio de 2005 el Pla Sanitari del Vallès, donde se comprometió a la construcción del hospital Ernest Lluch, a inaugurar el 2009-2010. Sin embargo, "todos estos años se ha estado mareando la perdiz". El anterior gobierno de la Generalitat acabó su mandato "sin haber puesto la primera piedra" y el nuevo ejecutivo, "escudándose en la situación económica, paraliza un mínimo dos años el proyecto". Un proyecto que "nació viciado al incorporarse en su plan urbanístico la construcción de 520 viviendas y que, ahora, para acabarlo de rematar, ve otro cambio del plan urbanístico para poder construirse un hotel".
Ante esta situación, los impulsores de la manifestación exigen que en ningún caso se dé la gestión de la sanidad a entidades con ánimo de lucro, ya que "salud y negocio son incompatibles". También reclaman que "no se justifique de ninguna manera la reducción ni la externalización de servicios", que "se reduzcan las listas de espera", que no se desgraven impuestos a quien paga un seguro privado porque "no queremos una sanidad para ricos y una beneficiencia para pobres", y que no se implante ningún sistema de copago, tasas o tiquets moderadores para limitar el acceso de la población a la sanidad. Por otro lado, se exige un aumento de la financiación sanitaria hasta niveles europeos (según PIB) y la reorientación de la sanidad, situando la Atención Primaria como "pilar de la sanidad", incluyendo los hospitales. Finalmente, el manifesto concluye reclamando que "sin excusas ni intereses especulativos se inicie ya la construcción del hospital Ernest Lluch, de titularidad y gestión pública".
Foto: Ajuntament de Ripollet
