La Asociación de Desempleados de Cerdanyola y Ripollet organizó el pasado sábado una manifestación para reclamar el derecho a un trabajo digno y su rechazo a los despidos y la precariedad laboral. En Ripollet, los participantes se concentraron al mediodía en la plaza Pere Quart, mientras que en Cerdanyola lo hicieron en la plaza Abat Oliba. Tras realizar un recorrido por los respectivos municipios, los manifestantes se encontraron en los Quatre Cantons en una marcha organizada apenas cinco días antes de la huelga general del próximo jueves.Desde la Asociación de Desempleados de Ripollet y Cerdanyola reclaman "un trabajo digno para todo el mundo" y destacan, entre otros aspectos, que la reducción de la jornada laboral sin recorte de salario podría ser posible sin se apostara por medidas como la prohibición de las horas extras y el trabajo a precio hecho, que incentivan que "el empresario siga ganando, el trabajador sea explotado y aquel que no tiene empleo continúe sin trabajo".
Desde el colectivo abogan por la gratuidad de los servicios básicos para aquellas unidades familiares en la que todos los miembros se encuentren en paro, a la vez que reclaman la moratoria en el pago del alquiler o la hipoteca en viviendas habituales para que nadie se vea expulsado de su hogar debido a que no tiene trabajo y por tanto no puede pagar el alquiler o cuota hipotecaria. Por otro lado, la asociación también apuesta por la gratuidad del transporte público para todos los desocupados.
Sensibilizar a la ciudananía
Con la movilización del pasado sábado, la asociación pretendía sensibilizar a la ciudadanía sobre la problemática del desempleo -afecta a unas 9.000 personas de Ripollet y Cerdanyola-, una lacra que, según el colectivo, "presumiblemente irá a más y afectará cada vez a más ciudadanos". Igualmente, la asociación considera que hay que "dar un toque de atención a nuestros gobernantes" y presionar a los respectivos ayuntamientos "para que tomen las medidas convenientes para hacer frente al problema", impulsando políticas de ocupación, bolsas de trabajo y replanteándose las contratas externas.
La Asociación de Desempleados de Ripollet y Cerdanyola engloba a personas en paro de los dos municipios, trabajadores en situación de precariedad y personas con trabajo pero sensibilizadas con la problemática, además de militantes del 15-M, de partidos de izquierda y de sindicatos. El colectivo surgió en Ripollet a finales del pasado año y ahora ha unido esfuerzos con sus vecinos de Cerdanyola constituyéndose en una sola asociación. En este sentido, el colectivo remarca que "los parados debemos tomar conciencia de nuestra situación y tener claro que si nos ponemos manos a la obra, se pueden lograr objetivos". Y es que "la problemática del paro se está enfocando de una manera en la que parece que los desempleados debamos quedarnos quietos y esperar unas medidas políticas que resuelvan, no se sabe cuando, el problema". Ante ello, desde la asociación llaman a la unión y la movilización.
Foto: Asociación de Desempleados de Ripollet y Cerdanyola
